La idea de los brazaletes integrados se popularizó en la década de 1970, cuando la amenaza de la crisis del cuarzo combinada con el cambio estilístico provocó un cambio en el diseño de los relojes. Omega ideó su propia interpretación del uso de un brazalete integrado cuando lanzó este Omega Genève 166.0173 en 1973. La bien proporcionada caja de acero inoxidable de 36 mm que se conecta a la perfección con el brazalete es una combinación que funciona realmente bien. La impresionante esfera de textura azul oscuro combinada con el diseño de la caja y el brazalete hacen de este reloj una pieza de pulsera deportiva y con clase, todo en uno. 

Este Omega Genève funciona con el robusto movimiento automático cal. 1012 con función de fecha, que hace de este reloj un centro neurálgico listo para cualquier aventura. La calidez de la luz de tritio en las agujas y los índices que juega con el color de la esfera y las agujas blancas es realmente especial. El estado de conservación de este reloj es bueno, con algunos pequeños arañazos en la caja y el bisel que parecen estar sin pulir. El lume se ha conservado muy bien y muestra una pátina impresionante. 

Lo que nos gusta:

• Esfera bellamente conservada
• Diseño icónico de los 70
• Revisado en octubre de 2021

Lo que hay que saber:

• Pequeño arañazo en el bisel y la caja