Ir al contenido principal

Hemos querido ofrecer a nuestros lectores una breve cronología de los hitos más importantes de la historia de Omega.

El negocio comenzó en 1848 en un modesto taller creado por Louis Brandt en La Chaux de Fonds (Suiza).

Brandt mantuvo una modesta empresa en los treinta años posteriores a su creación, vendiendo sus relojes a clientes de todo el mundo.

En 1879 fallece y sus hijos se hacen cargo de la empresa. En 1885 introdujeron su primer calibre de producción en serie, el Labrador, y en 1892 fabricaron el primer reloj con repetición de minutos.

Sólo dos años más tarde, los hermanos lanzaron el calibre Omega de 19 levas, que se hizo famoso en la industria relojera y acabaría dando nombre a la empresa.

En 1905, Omega comenzó a actuar como cronometrador oficial en acontecimientos deportivos en toda Suiza, y en 1932, Omega formó una de sus más importantes asociaciones de cronometraje. Por primera vez, OMEGA fue responsable de los Juegos Olímpicos de Los Ángeles, California.

Hasta hoy, la relación ha persistido y Omega ha sido el cronometrador oficial de muchos Juegos Olímpicos.

En 1948, Omega publicó la primera versión de uno de sus relojes más reconocibles: el Omega Seamaster.

vintage Omega Seamaster 600 reloj 136.011 1965 chapado en oro

El primer Seamaster debutó coincidiendo con el centenario de la empresa.

Hoy en día, este modelo es uno de los relojes más comunes de la famosa familia de relojes Omega.

En 1962, Omega hizo historia cuando el astronauta Wally Schirra llevó un Speedmaster en su vuelo Mercury Sigma 7, convirtiéndolo en el primer Omega en el espacio.

Sólo tres años más tarde, la NASA le concedió un importante respaldo que convirtió al Speedmaster en el cronógrafo oficial de las misiones espaciales estadounidenses.

vintage omega speedmaster 145022-69 macro escritura recta

En 1969, el Omega Speedmaster hizo su primer viaje a la Luna en la muñeca de Buzz Aldrin, y en 1970, el Speedmaster ayudó a los astronautas de la misión Apolo 13 a regresar sanos y salvos a casa.

A día de hoy, Omega y los programas espaciales de todo el mundo siguen colaborando estrechamente para crear algunos de los relojes espaciales más potentes.

En la década de 1990, Omega se dio a conocer como el reloj oficial de James Bond tras la aparición de un Omega Seamaster en la muñeca de Pierce Brosnan.

Omega ha mantenido su reputación como una de las marcas de relojes más populares del mundo. Lleva más de 150 años comprometida con la calidad. Sus diseños atemporales son apreciados en todo el mundo.

La popularidad de los relojes Omega antiguos ha aumentado gradualmente en los últimos años.